Rublev ha tenido problemas para controlar sus emociones a veces durante los partidos y sus arrebatos han ensombrecido su juego, pero el ruso de 27 años mostró su mejor cara con la conquista del título en Doha la semana pasada.
Rublev regresa esta semana a Dubai, donde la temporada pasada fue expulsado por incomparecencia en un partido después de que un funcionario de habla rusa dijera que había proferido una obscenidad mientras gritaba a un juez de línea.
Rublev dijo que había superado ese incidente y otros problemas que le habían estado arrastrando.
"Estuve en un bucle, perdido conmigo mismo durante un par de años de, no sé, no encontrar el camino, no entender qué hacer, para qué", dijo Rublev al diario The National.
"Suena un poco tal vez dramático o lo que sea, como cuál es la razón o el propósito de vivir o cosas así.
"Una cosa es cuando pasa un mes, dos meses, tres meses. Puede que aún tengas paciencia... Cuando se prolonga durante muchos años, ya no puedes soportarlo".
Rublev dijo que tomó antidepresivos durante un año, pero que los dejó cuando ya no le ayudaban.
Las cosas empezaron a cambiar el pasado julio tras hablar con su compatriota Safin, que se retiró en 2009. Safin, ex número uno del mundo, no era ajeno a los arrebatos, pues había roto docenas de raquetas en la pista durante su carrera.
"Me hizo entenderme a mí mismo", añadió Rublev.
"Fue como volver a empezar desde abajo. Poco a poco pude empezar a avanzar en una dirección mejor".
"No estoy contento. No estoy ni bien ni mal, pero ya no siento estrés, ni ansiedad, ni depresión. Sólo estoy neutral. Al menos he encontrado una base. Eso es un comienzo".
Rublev comienza su campaña en Dubai contra el francés Quentin Halys, clasificado, el martes.