Flamengo y Cruzeiro empataron 0-0 este jueves en el Maracaná, en el partido estrella de la jornada del Brasileirao, lo que mantiene con vida a los visitantes en la lucha por el título y que beneficia principalmente al Palmeiras, que vuelve a depender de sí mismo para situarse primero.
A continuación, las tres escenas que marcaron la 26ª jornada del Campeonato Brasileño:
El Palmeiras, gran beneficiado
Tras dejar de depender de sí mismo el fin de semana al perder 1-0 contra el Bahia, el Verdao arrolló el miércoles (3-0) al Vasco da Gama y vio cómo Flamengo y Cruzeiro, los otros dos aspirantes al título, empataban sin goles en el Maracaná, ante más de 72.500 espectadores, pasando a depender nuevamente de sí mismo para ser líder.
En el duelo más destacado de la jornada, ambos clubes dispusieron de buenas oportunidades para abrir el marcador, aunque en un choque muy igualado y de alto nivel, el empate fue el resultado más justo.
Gabigol, el gran ídolo de los últimos años en el Flamengo y que regresaba por primera vez como rival en el Maracaná, entró en el minuto 87 y no dispuso de ninguna ocasión de gol.

"Faltó el gol. Creo que nuestro equipo hizo el partido que preparó; creamos ocasiones y tuvimos oportunidades, aunque lamentablemente no terminaron en gol. Creo que fue un buen partido desde el punto de vista táctico", declaró tras el encuentro el volante del Flamengo Jorginho.
"El principal objetivo es llevar el Cruzeiro a la Libertadores. Lucharemos hasta el final, faltan muchos partidos, prefiero pensar en el próximo partido, que tendremos un día menos de descanso que el rival", dijo el portero visitante Cássio.
Con el empate, el tercero consecutivo del Fla como local tras haber igualado anteriormente contra Gremio y Vasco, el cuadro carioca lidera la tabla con 55 puntos, seguido del Palmeiras, con 52 y un partido menos, y el Cruzeiro, que tiene 51 puntos.
Como el principal criterio de desempate en Brasil es el número de victorias, si el Palmeiras gana el partido pendiente que tiene ante el Juventude (en descenso), igualará a puntos con el Flamengo pero sumará 17 victorias, por 16 de los cariocas, con lo que recuperará el liderato.
Empate polémico
Uno de las mayores rivalidades entre equipos de distintas ciudades y estados en Brasil es la del Internacional de Porto Alegre con el Corinthians de Sao Paulo, con un largo histórico de polémicas, disputa de títulos e incluso descensos.
Este miércoles, los jugadores del Corinthians se midieron al Inter del veterano argentino Ramón Díaz, quien fue destituido en abril del Timao por los malos resultados.
El Corinthians se adelantó con un tempranero gol del joven Gui Negao, aunque en el minuto 90+5, en la última jugada, el VAR avisó al árbitro para que revisara un choque entre el defensa Cacá y Bruno Henrique en el área visitante, que inicialmente no había considerado falta.

Tras revisarlo y decretar penalti, lo que enfureció a los corinthianos, el colombiano Johan Carbonero empató en el 90+12'.
"Es desanimador. No me gusta hablar del arbitraje, pero es difícil lo que sucedió aquí. En el inicio, Bruno Henrique ya se estaba tirando. Es muy frustrante. Nos entregamos al máximo, pero el árbitro se cargó el partido", criticó Gustavo Henrique.
"Enhorabuena por la confusión que consiguió crear", lamentó Dorival Junior, el técnico visitante.
Con el empate, Inter y Corinthians siguen en la parte media baja de la tabla, con dos partidos de margen sobre el descenso.
Crespo gana a Palermo
Además de Ramón Díaz, otros dos legendarios delanteros argentinos también entrenan en Brasil, y este jueves se vieron las caras: Martín Palermo y Hernán Crespo.
El primero es ídolo histórico en Boca Juniors y el segundo lo es en River Plate, y los dos buscan ahora consolidarse en el exigente fútbol brasileño como entrenadores: Palermo en el Fortaleza y Crespo en el Sao Paulo. Los dos asumieron recientemente los dos banquillos que ocupan actualmente.
En un partido con muchas urgencias, por el mal momento de ambos equipos, Hernán le ganó la partida a Martín con una victoria por 2-0, resultado que mantiene a los cearenses en zona de descenso y pone fin a cuatro derrotas seguidas del Sao Paulo entre Brasileirao y Libertadores.
"No tuvimos eficacia", lamentó M. Palermo. "Volvemos a casa felices, confiados, con una gran actuación del equipo, que jugó muy bien y entendió lo que necesitaba: luchar y pelear", subrayó Crespo.