El jugador de 24 años ha firmado una extensión de cuatro años y 130 millones de dólares, con 90 millones garantizados. Se trata de la cuarta mayor garantía para un receptor de la liga.
Wilson también recibió una prima por firmar de 13,75 millones de dólares junto con el acuerdo, que se extiende hasta 2028.
El ex Buckeye de Ohio State ha tenido números impresionantes desde que se unió a la liga. Hasta el momento, ha jugado en los 51 partidos con los Jets desde que fue seleccionado, superando las 1.000 yardas de recepción en cada una de sus tres primeras temporadas. Y ello a pesar de haber jugado con siete quarterbacks diferentes durante ese tiempo.
Además, el que fuera elegido en primera ronda del draft es uno de los cinco jugadores en la historia de la NFL con al menos 80 recepciones y más de 1.000 yardas de recepción en cada una de sus tres primeras temporadas.
Este movimiento llega en un momento en el que los Jets están en plena reconstrucción tras una temporada de 5-12 el año pasado, en la que acabaron terceros en la AFC Este. Se quedaron sin jugar la postemporada por decimocuarto año consecutivo, y sólo en una de esas campañas terminaron con un récord ganador.
Es probable que Wilson tenga que acostumbrarse a otro quarterback el año que viene tras la marcha de Aaron Rodgers. En cualquier caso, seguirá siendo un Jet en el futuro inmediato.