El Arsenal alcanzó un logro histórico en la Champions League tras vencer al Atlético y conseguir su victoria número 100 en la máxima competición europea. Este logro sitúa al club londinense entre los equipos más exitosos del formato moderno, instaurado en la temporada 92/93.
Fue una noche de celebración para el equipo de Mikel Arteta, que confirmó su excelente estado de forma en la presente temporada. La primera victoria del Arsenal en la competición se remonta a la temporada 98/99, cuando el equipo sumó dos triunfos en esa edición inaugural.
Desde entonces, la acumulación de éxitos refleja la constancia y evolución del club en el escenario europeo. En la temporada 05/06, los Gunners lograron ocho victorias, su mejor registro hasta la 24/25.
A partir de ese momento, la eficacia del club descendió, ya que no logró más de cinco victorias en los siguientes 11 años. Tras la temporada 16/17, los Gunners estuvieron seis años fuera del principal torneo europeo, hasta que regresaron en la 23/24, donde sumaron cinco triunfos.
Sin embargo, la pasada temporada fue especialmente significativa, ya que el Arsenal firmó un récord de nueve victorias bajo la dirección de Arteta, aunque el conjunto londinense acabó cayendo ante el vigente campeón, el PSG, en las semifinales del torneo.
A lo largo de los años, nombres icónicos han forjado la historia europea del club. Thierry Henry encabeza la lista con 33 victorias, seguido por Cesc Fàbregas, Robert Pires y Fredrik Ljungberg, todos con 28. El top 10 lo completan Theo Walcott y Kolo Touré, con 27; Aaron Ramsey, Robin van Persie y Emmanuel Eboué, con 26; y Mathieu Flamini junto a Patrick Vieira, con 24.
El centenario europeo refleja más de dos décadas de esfuerzo competitivo y mantiene viva la memoria de una generación que llevó al Arsenal a la final de la Champions League en 2006. Desde entonces, el equipo se ha reinventado, adaptándose a nuevas etapas con diferentes entrenadores y generaciones de futbolistas.
En la presente temporada, con un gran inicio tanto en la Premier League como en la Champions League, el equipo de Arteta vuelve a la escena internacional con el objetivo de conquistar el trofeo por primera vez en su historia.