La jugadora del Barcelona se perdió el amistoso de este viernes, igual que Lucía García, y tuvo que ver desde el hospital la actuación de sus compañeras. Ella misma se encargó de publicar una imagen en la que aparece tumbada en la cama de un centro médico, con una vía colocada en el brazo, e incluso tapada por una manta a escasos dias de que llegue el mes de julio.
Aunque este tipo de meningitis no es tan grave como la bacteriana, igualmente requiere de un tratamiento con antibióticos antes de poder retomar la actividad. Su presencia ante el plantel luso se presencia casi utópica en estos momentos, pues se requiere al menos de una semana de recuperación -siendo entre dos y tres el plazo más común-.

"El entrenamiento no pudo hacerlo ayer por unas décimas de fiebre, durante el día no mejoró, estaba cansada y hoy por la mañana la han llevado a hacer pruebas. En principio salían bien, pero tras la última, ella me autoriza a decir que tiene una meningitis vírica", expresó Montse Tomé tras la victoria ante Japón (3-1).
"La palabra asusta, pero lo que me dice el doctor es que está controlado; estará ingresada y no sabemos plazos. Ahora mismo es la información que puedo trasladar. Para nosotros es una jugadora importantísima y la vamos a esperar sí o sí hasta el final", concluyó la seleccionadora sobre el estado físico de la doble Balón de Oro.