El extremo, al que el Bayern firmó a finales de 2023 deprisa y corriendo, como cuando semanas antes De la Fuente lo hizo debutar con la selección española, no tuvo oportunidades en la Bundesliga. Su falta de adaptación al equipo, al idioma y a la vida en Alemania, le llevaron de vuelta a España después de jugar apenas siete partidos.
La pasada campaña la pasó en El Sadar, donde recuperó su habitual alegría y desparpajo sobre el campo hasta que una lesión muscular le cortó de raíz su progresión. Y volvió incluso a ser convocado con España. Pero a pesar de su buen rendimiento, con seis asistencias y un gol en 27 partidos, en el club bávaro tenían muy claro que no tenía sitio y que querían traspasarlo.

Todo se ha alargado porque ningún club de LaLiga, ni el Betis ni el Celta ni ningún otro quería pagar lo que exigía el Bayern. Así que, finalmente, después de muchos tira y afloja, de incluso llegar a romper las negociaciones, han sido los vigueses los que se han llevado el gato al agua con un préstamo y una compra que será obligatoria si se cumplen ciertas cosas.
Bryan Zaragoza, si nada extraño ocurre en las próximas horas, se incorporará en breve a la estadía que sus futuros compañeros están celebrando en Suiza.