Se volvió un tema que ocurre año tras año: una vez más, la Real Sociedad ha preferido vender al jugador 'estrella', buscar uno diferente y probar, en lugar de mantener la base. En este caso, fue Martín Zubimendi el hombre que tuvo que salir en el mercado de verano.
El centrocampista, esencial para la etapa de Imanol Alguacil, fichó por el Arsenal, club en el que es titular y en el que se ubica en el pivote, acompañado por Declan Rice y Martin Odegaard.
Hace dos años, Mikel Merino, de destacado rendimiento, se marchó, de igual manera, al Arsenal de Arteta. Merino ha sido una alternativa: gracias a su polivalencia, incluso llegó a jugar de delantero centro cuando se lesionaron Kai Havertz y Gabriel Jesús. Ahora, rota en la medular con Odegaard y Rice. Sorloth, otro de buena campaña, se fue al Atlético de Madrid, club en el que es suplente a pesar de registrar buenos números.
En la 22-23 Aleksander Isak se marchó al Newcastle en una venta récord para los blanquiazules. Las urracas pagaron 77 millones de euros por el delantero, reciente incorporación del Liverpool ( y la venta más cara en la historia de la Premier.