Ya es oficial. A primera hora de la tarde del sábado 9 de agosto, Iñigo Martínez firmó su millonario contrato con el Al Nassr para convertirse en compañero, entre otros, de Cristiano Ronaldo o Joao Félix, y quién sabe si para sustituir a Aymeric Laporte, central zurdo como él que con su llegada tendría vía libre del club para regresar al Athletic Club.
Atrás queda una carrera en la que triunfó en la Real Sociedad antes de marcharse de manera polémica, como siempre ocurre con quien cambia San Sebastián por Bilbao, al Athletic, que pagó su cláusula de rescisión de 32 millones de euros en enero de 2018. Allí, como león bilbaino, también mostró durante seis años sus virtudes de líder, lo que le valió, tras negarse a renovar su contrato, firmar por el Barcelona sin dejar un céntimo en San Mamés. Y después de dos años a muy buen nivel, más el segundo que el primero, y con otro más de contrato, Iñigo Martínez decidió que era hora de nuevo de cambiar.

La aventura le llegará a la rica Saudi Pro League, donde ganará más de 10 millones de euros libres de impuestos, casi cuatro más de lo que percibía en un Barça que no puso ninguna pega en dejarle salir. Al contrario. Su puesto está bien cubierto con Araújo, Pau Cubarsí, Éric García y Christensen, además del descubrimiento de Gerard Martín. Y encima libera unos 14 millones de euros de masa salarial, un respiro enorme para las finanzas blaugranas.
Iñigo Martínez ha firmado por una temporada más otra más según objetivos conseguidos con el Al Nassr.