El Villarreal-Barcelona es un evento que no pasa desapercibido. De un lado, genera interés por aquellos que quieren ver a sus equipos jugar en EEUU. Del otro, surgen críticas por la equidad. El inconformismo ha despertado varias críticas en torno a la idea. En la mañana de este miércoles, Fernando Roig, presidente del submarino amarillo, ha estallado en contra de las críticas.
“El Villarreal no va a percibir nada por jugar un partido en Miami. Hemos preferido que todo el dinero que se pueda destinar sea para los abonados. Hemos intentado paliar ese inconveniente de dos formas diferentes: invitando gratuitamente a los que puedan desplazarse a Miami y devolviendo entre el 25 y el 30% del abono a los que no puedan hacerlo", dijo.
El presidente del Villarreal también ha defendido el evento, asegurando que no afecta el desarrollo de LaLiga. “No se adultera la competición cuando juegas en otro campo. Nosotros hace dos años jugamos siete partidos en el estadio del Levante y no pasó nada", cerró.