Kylian Mbappé (27) llegó al Real Madrid en el verano de 2024, pero asumió totalmente el rol de líder de la plantilla blanca con plenos poderes un año después. Su relevancia es mucho mayor que en la 2024/25 y lo ha demostrado, sobre todo, con goles.
Durante el primer curso del galo en el Bernabéu, Carlo Ancelotti supo gestionar la situación para que las estrellas del pasado no se sintieran molestas con la irrupción del delantero de Bondy. No le salió del todo mal al preparador italiano, pero los últimos meses de su estancia en la capital de España todo comenzó a resquebrajarse.
Ahora, con el inicio de la campaña 2025/26, a Xabi Alonso (44) le ha tocado lidiar con una situación que se aproxima cada vez más a ser insostenible, con un vestuario descontrolado y varios frentes abiertos de difícil solución.
Pero por encima del resto, preocupa el caso de Vinicius Jr. (25). El club no consigue llegar a un acuerdo de renovación con él y sus gestos públicos de desacuerdo por perder protagonismo en favor de Mbappé son constantes, generando mucha tensión con el entrenador tolosarra.
¿Vinicius tiene motivos para quejarse?
La postura del extremo carioca está clara: quiere jugarlo todo y considera que Xabi le está quitando la oportunidad con sus constantes cambios. Por ello, en varias ocasiones parece que ha tratado de proponerle un pulso tanto al técnico como al club.
Ello nos conduce a realizarnos una pregunta: ¿realmente Vinicius está en disposición de protestar por su situación? La cuestión podría tener difícil respuesta, pero es relativamente sencilla si nos ceñimos a los fríos datos.
Resulta que desde la llegada del nuevo entrenador a la Casa Blanca, el '7', contando el Mundial de Clubes, ha tenido prácticamente el mismo peso que Mbappé en tiempo de juego, con 2.241 minutos en 30 partidos por 2.246 en 27 del francés.
Únicamente con eso ya comienza a desmontarse el argumento de Vini, pero el castillo de naipes se le viene del todo abajo cuando nos detenemos a mirar su aportación de cara portería. Mientras que Kyky ha anotado 30 goles desde el Mundial, el de Río de Janeiro apenas acumula seis. ¡Cinco veces menos!
Nada más que logran maquillar las cifras del internacional con la Seleçao sus aportaciones con valor gol, dado que sus nueve asistencias le elevan a 15 intervenciones directas en dianas, por 34 de su compañero.
Un cambio de rol justificado
Si nos atenemos a las cifras analizadas, no es descabellado decir que el descontento de Vinicius es difícilmente justificable. Aporta bastante menos que hace un par de temporadas y, además, el nuevo líder del Real Madrid le ha pasado por la derecha.
Estamos hablando de que el extremo izquierdo ha pasado de comandar al equipo en la conquista de la 15ª Champions League en 2024 y pelear por llevarse el Balón de Oro, a tener un papel residual y ser más protagonista por sus desplantes que por su juego.
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