Aunque los brasileños tuvieron el primer disparo del partido en el minuto 2, con un remate de Bruno Fuchs que fue bloqueado, fueron los del oeste de Londres los que salieron más rápidos, con Cole Palmer como protagonista.
El Chelsea salió al ataque desde el primer minuto
El disparo a puerta del internacional inglés fue seguido rápidamente por otro, y Enzo Fernández también estuvo cerca con uno de sus dos remates, mientras el Chelsea arrollaba a su rival con un 77,6% de posesión en los primeros 15 minutos de este partido.
Parecía sólo cuestión de tiempo que los Blues se adelantaran en el marcador, y eso fue exactamente lo que sucedió al cuarto de hora.
Trevoh Chalobah se internó en territorio del Palmeiras, y su pase raso y preciso fue magníficamente controlado por Palmer a la media vuelta, que se zafó de la defensa rival y remató a gol.
Eso debió encender las alarmas en el Palmeiras, ya que el Chelsea tenía un registro en la Copa Mundial de Clubes de 3-0-1 cuando marcaba el primer gol.
Aun así, el Chelsea se lanzó al ataque, y Marc Cucurella, Chalobah y Fernández se sumaron a la cuenta de ocho disparos del Chelsea antes de la media hora de juego.
Las estadísticas de precisión de pase evidenciaron la diferencia de calidad
La diferencia de calidad fue marcada y más notable en la distribución de ambos equipos. Todos los jugadores del Chelsea se situaron a partir del 80%, siendo el 95,5% de Cucurella el mejor registro. Por el contrario, la mayoría de los jugadores del Palmeiras se situaron entre el 60% y el 70%, destacando el 94,6% de Micael.
Hubo que esperar hasta el minuto 42 para que los brasileños realizaran su primer disparo a puerta, obra de Vanderlan, y su falta de acierto de cara a puerta se debió en gran medida a la excelencia defensiva de Malo Gusto, cuyas cinco entradas en la primera parte -incluida una por la que fue amonestado al final de los primeros 45 minutos- fueron la mayor cantidad realizada por cualquier jugador.
A los seguidores del Palmeiras no les sorprendió la falta de goles, ya que no habían logrado perforar la defensa rival en la primera parte de ninguno de sus cinco partidos, mientras que el Chelsea no había encajado goles en ninguno de sus cinco encuentros antes del descanso.
Los aficionados de los Blues tampoco podían estar descontentos con los esfuerzos de sus jugadores, aunque no se puede decir que el nuevo fichaje, Liam Delap, causara una buena impresión, ya que sólo dio ocho toques antes de que sonara el silbato del descanso.
Siete minutos después de la reanudación, Estevao, que se incorporará al Chelsea al término del torneo, marcó el gol del empate desde un ángulo agudo, en el segundo disparo a puerta del Palmeiras. Sin embargo, la forma tan efusiva en que lo celebró no gustó a los seguidores de Stamford Bridge.
El tercer gol del equipo brasileño en los primeros 15 minutos de la segunda parte significaba que ningún equipo había marcado más en ese periodo de tiempo en el Mundial de Clubes.
El gol del empate provocó la furibunda reacción de Enzo Maresca, que realizó dos rápidas sustituciones, entre ellas la de Delap (que estará suspendido para la semifinal por su segunda tarjeta amarilla en el torneo), e instó a sus jugadores a subir al campo.
Un gol en el último minuto mete al Chelsea en semifinales
La arenga pareció surtir efecto, ya que el Chelsea no tardó en lanzar cuatro disparos a puerta para reafirmar su autoridad en el partido.
Joao Pedro, que sustituyó a Delap, dio muestras de su calidad durante sus 37 minutos en el campo, con ocho toques en el área contraria, frente a uno solo del exjugador del Ipswich Town. De hecho,las incursiones del primero en territorio del Palmeiras se convirtieron en una auténtica característica y dieron al nuevo fichaje cierto protagonismo en la eliminatoria.

En la recta final del encuentro, el Chelsea volvió a pisar el acelerador y sólo concedió alguna que otra ocasión a su rival.
Un 62,7% de posesión colectiva y 19 disparos, frente a los siete del Palmeiras, fueron una clara muestra del dominio del equipo de la Premier League.
A falta de ocho minutos para el final, un disparo de Malo Gusto fue desviado por la bota extendida de Agustin Giay y el Chelsea ya estaba casi en casa. Los esfuerzos de Estevao fueron en vano, y lo más preocupante fue que perdió el balón en 17 ocasiones, más que ningún otro jugador.
Por mucho que lo intentara, el Palmeiras sólo disparó siete veces a puerta, su cifra más baja en el Mundial de Clubes, y con un 41,0% de las acciones en su tercio de campo durante los últimos 15 minutos, los brasileños se quedaron sin fuerzas ante un equipo de la Premier League más en forma y más sólido.
_______________________________________________
Patrocinado:
Copa Mundial de Clubes de la FIFA - Todos los partidos gratis, en exclusiva en DAZN.
Regístrate aquí para empezar la transmisión
_______________________________________________
Consulta aquí el resumen completo del partido.
