Los alemanes se clasificarán de manera automática para el Mundial del próximo año, que será coorganizado por México, Estados Unidos y Canadá, si logran una victoria o incluso un empate, ya que lideran el Grupo A con 12 puntos, por delante de Eslovaquia por diferencia de goles. Los eslovacos les vencieron en el primer partido clasificatorio en Bratislava por 2-0 en septiembre.
Una derrota en casa, sin embargo, podría ser desastrosa y dejar a Alemania en la segunda posición, obligándola a disputar un playoff en marzo para conseguir un puesto en el torneo del próximo año, algo que Nagelsmann y sus jugadores quieren evitar a toda costa.
"No, no es un tema (que podamos fallar). Pocos equipos se plantearían esto, lo que podría salir mal", ha declarado Nagelsmann en rueda de prensa, dos días después de la victoria ante Luxemburgo por 2-0.
"Quizá estamos algo nerviosos antes de mañana. Este tipo de partidos tienen mucho atractivo. Al final, hay que aceptar las cosas como son. Nos habría gustado ganar en Eslovaquia, pero es lo que hay", ha añadido.
"Confiamos en que jugaremos bien y sumaremos los tres puntos".
Los alemanes, campeones del mundo en cuatro ocasiones, tienen como objetivo levantar el trofeo en el Mundial tras sus decepcionantes eliminaciones en la primera ronda en las dos últimas ediciones, el peor registro de su historia en el torneo.