Alejandro Garnacho, Jadon Sancho, Antony y Tyrell Malacia fueron excluidos de la plantilla que viajó a Estados Unidos para la gira de pretemporada del club, y el cuarteto buscaba, y busca, traspasos lejos de Old Trafford.
Pero aunque han tenido que trabajar al margen de la plantilla principal desde que el United regresó a los entrenamientos antes de la nueva temporada, Amorim reconoció que estaría preparado para aceptar a los jugadores de nuevo si no eran vendidos.
"Algunos tienen que encontrar un nuevo lugar para tener más espacio en el equipo y otros jugadores muestran claramente que quieren un nuevo reto y quieren nuevos equipos", dijo Amorim a los periodistas en Chicago antes del encuentro de pretemporada con el West Ham United, el sábado.
"Sólo estamos dando tiempo a estos jugadores para que piensen y decidan. Si llegamos a un punto en el que tienen que unirse al equipo, se unirán porque son nuestros jugadores".
"Estoy preparado para recibir a los jugadores. Tienen más competencia si quieren jugar en el Mundial el año que viene, tienen que jugar", recordó el técnico portugués.
"Por eso, estoy muy contento con eso, porque tengo más opciones. Si tienen que luchar entre ellos para jugar, para mí es perfecto".
El United ha fichado a Matheus Cunha y Bryan Mbeumo en lo que va de mercado de fichajes, mientras que el inglés Marcus Rashford se ha marchado cedido al Barcelona. Los Diablos Rojos buscan recuperarse de un modesto 15º puesto en la tabla clasificatoria del año pasado.
La situación financiera del club es tal que el United necesita vender jugadores si quiere reforzar su plantilla.
"Sé de buena fuente que estas personas - Jason, Omar y el club - tienen un valor para estos jugadores", dijo Amorim. "Si no llegan a ese valor, serán jugadores del Manchester United, sin ninguna duda. Entiendo que los clubes (interesados) estén esperando hasta el último minuto, pero pueden llevarse una sorpresa", finalizó.