Grealish, quien llegó cedido al Everton tras no contar con muchos minutos en el Manchester City, ha mostrado una versión renovada en las primeras semanas de la temporada y fue el mejor sobre el campo en la victoria del Everton por 3-2 en Molineux el sábado.
El jugador de 29 años participó en los tres goles del Everton, sumando dos asistencias a las dos que ya había dado la semana pasada en casa ante el Brighton y Hove Albion.
Fue una actuación llena de ingenio, de las que le han valido 39 convocatorias con Inglaterra, pero que han escaseado en los momentos complicados bajo la dirección de Pep Guardiola en el Manchester City.
"El mayor elogio que puedo hacerle a Jack es que es incluso mejor de lo que pensaba", aseguró el entrenador del Everton, David Moyes, cuya reputación pragmática no le convierte precisamente en un admirador típico de un talento tan impredecible, que a veces puede desesperar.
"El buen momento de Jack es mérito suyo. No me atribuyo el crédito por ello. Estoy seguro de que aún tiene algo que demostrar. Jack quiere dejar claro que es un gran jugador.
"Está marcando la diferencia de muchas maneras, ya sea con sus asistencias o con su presencia en el campo."
El Everton ya suma seis puntos en sus tres primeros partidos y Moyes afirmó que el objetivo debe ser clasificarse para Europa si logran reforzarse antes del cierre del mercado de fichajes.
"Un club como el Everton siempre debe aspirar a Europa, no tiene sentido decir que solo queremos evitar el descenso. Hay que dar a los aficionados algo en lo que creer."
Si Grealish mantiene el nivel con el que ha comenzado la temporada, ese objetivo podría estar al alcance del Everton y él mismo podría volver a ganarse un sitio en la selección para el Mundial del próximo año.