El fútbol es un juego de ciclos. El miércoles, Everton y Liverpool cerraron el capítulo de los derbis de Merseyside en Goodison Park con un dramático empate, pero al mismo tiempo se escribió una nueva página de la historia.
Arne Slot reunió un equipo sin jugadores ingleses en el once inicial, algo que nunca había ocurrido en la historia del club en la Premier League.
Los Reds son uno de los clubes de fútbol más tradicionales de Inglaterra, no sólo por ser, junto con el Manchester United, el club con más títulos ligueros, sino por todo lo que rodea al club, desde Anfield hasta el You'll Never Walk Alone, pero los signos de los nuevos tiempos volvieron a hacerse patentes.

Alexander-Arnold evitó este hito histórico al ser titular en la jornada anterior contra el Bournemouth, pero empezó el derbi en el banquillo junto a su compatriota Curtis Jones, ambos entrando en la segunda parte.
En una alineación con nueve nacionalidades, elegida por el neerlandés Slot, Países Bajos contó con tres representantes: Van Dijk, Gravenberch y Gakpo. Por parte del Everton, entrenado por David Moyes, fueron titulares cuatro ingleses. Tarkowski, uno de los representantes de los Tres Leones, marcó el gol del empate en el 90+8'.