Considerado por muchos como el mejor jugador del equipo, el hecho de que cumpla 32 años al inicio de la próxima temporada no ha pasado desapercibido para la directiva.
La venta de Bruno podría beneficiar a largo plazo al United
Aunque cualquier movimiento del club para facilitar la salida del portugués de Old Trafford podría generar rechazo entre los aficionados, una venta podría ser lo mejor para el club pensando en el futuro.
Según informaciones recientes, el Al Nassr de Arabia Saudí quiere juntar a Bruno con su capitán de selección y leyenda de United, Cristiano Ronaldo.
Además, el club saudí estaría dispuesto a pagar cerca de 100 millones de libras y a disputar un par de partidos amistosos de los que el club de la Premier League también podría sacar un buen beneficio económico.
Guste o no a los más tradicionales, las finanzas mandan en el fútbol actual y no clasificarse para Europa ha supuesto un duro golpe para el United.
La ausencia de competiciones europeas ha afectado al United
Esto quedó claro al no poder satisfacer todas las peticiones de fichajes de Ruben Amorim en la última ventana de traspasos.
El contrato actual de Bruno termina en 2027 y, con un salario de 300.000 libras semanales, supone un gasto considerable incluso solo hasta final de esta temporada. De hecho, solo Casemiro cobra más.
Teniendo en cuenta que el club no le ofrecería las mismas condiciones en un nuevo contrato —ya que para entonces tendría casi 33 años—, un cambio de aires en junio podría ser lo mejor para todas las partes.
Aunque Bruno crea que puede seguir compitiendo al máximo nivel en Europa, ningún otro destino fuera de la Saudi Pro League le ofrecerá un contrato tan atractivo en esta etapa de su carrera.
100 goles en 298 partidos
Por supuesto, los Red Devils echarían de menos su aportación. Desde su llegada en 2019, ha marcado 100 goles y repartido 83 asistencias en 298 encuentros.
Un promedio de un gol cada tres partidos desde el centro del campo, en un equipo que ha rendido por debajo de lo esperado, es impresionante. Además, se puede argumentar que su impacto ha ido mucho más allá de los goles y asistencias durante su etapa en el Teatro de los Sueños.

En líneas generales, su liderazgo es incuestionable, salvo alguna excepción puntual. Por eso, si el club está dispuesto a hacer caja, debe tener en mente a una figura de peso para reemplazar a Bruno.
Si se confirman otros rumores, no será el único jugador al que Amorim tendrá que buscar sustituto.
¿Mainoo y Zirkzee también se marchan?
Se sabe que Kobbie Mainoo sigue descontento con la situación en el club. Y, siendo año de Mundial, no sorprendería que el internacional inglés pidiera salir en enero, ya sea cedido o traspasado.
Joshua Zirkzee es otro que parece estar inquieto con su situación actual, quizá tras ver la rápida adaptación de su excompañero de ataque, Rasmus Hojlund, en el Napoli.
Sin olvidar lo felices que parecen tanto Antony como Marcus Rashford en LaLiga.

Con Benjamin Sesko asentándose en el United, el delantero neerlandés sabe que, salvo una plaga de lesiones en Old Trafford, seguirá teniendo un papel secundario. Eso no le beneficia de cara a sus opciones para el Mundial.
Desde su llegada al United en 2024, solo ha logrado siete goles y dos asistencias en 53 partidos oficiales. Por tanto, no está nada claro que Zirkzee vaya a ser convocado en cualquier caso.
La renuncia de Maguire si continúa
Un jugador que sí quiere seguir en el club es Harry Maguire.
Sin contar para Erik ten Hag, el central ha vivido una especie de 'renacimiento' y se ha convertido en uno de los hombres de confianza de Amorim, sobre todo por su actitud incansable.
Sin embargo, para seguir vinculado al club, Maguire tendrá que aceptar casi con total seguridad una rebaja salarial importante. Y si la situación deportiva no mejora, Amorim podría marcharse y llegar un técnico con ideas completamente distintas.
Así que los próximos seis a doce meses pueden ser de los más decisivos en la historia reciente del Manchester United. El futuro de varios empleados dependerá de lo que ocurra tanto dentro como fuera del campo.
Dolor a corto plazo para ganar a largo plazo
Está claro que el rumbo que la directiva tiene en mente exige tomar decisiones difíciles. Solo cuando eso ocurra, el club podrá analizar realmente hacia dónde quiere ir.
La expresión “dolor a corto plazo para ganar a largo plazo” se usa mucho, pero en este caso encaja a la perfección.
