Su único objetivo en Francia era "lograr otro récord", tal y como reconoció el miércoles, y el corredor de 24 años lo consiguió, iniciando de manera perfecta una temporada marcada por los campeonatos de Europa (6-9 de marzo en Apeldoorn, Países Bajos) y del mundo en pista cubierta (21-23 de marzo en Nankin, China), además de los Mundiales al aire libre (13-21 de septiembre en Tokio).
El campeón olímpico de los 1.500 metros en Tokio-2020 borró el anterior récord de la milla, del estadounidense Yared Nuguse, establecido en 3:46.63 el pasado 8 de febrero, durante los Millrose Games de Nueva York.
Tras celebrar con el puño derecho en alto su actuación, el doble campeón del mundo de los 5.000 m (2022, 2023) colocó este nuevo récord "arriba del todo" en sus logros.
Durante su victoriosa milla, Ingebrigtsen corrió los 1.500 minutos en 3:29.63, más rápido que su propio récord del mundo en sala en esa distancia (3:30.60 minutos) establecido hace tres años en el mismo estadio de Liévin.