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Lo que necesita Alcaraz en el US Open para ser número uno del mundo otra vez

Carlos Alcaraz apunta al trono de Jannik Sinner
Carlos Alcaraz apunta al trono de Jannik SinnerMATTHEW STOCKMAN / GETTY IMAGES NORTH AMERICA / Getty Images via AFP
Carlos Alcaraz (22) parte con una ligera ventaja en la clasificación virtual tras la retirada del italiano en Cincinnati. Para Jannik Sinner (24), la única certeza es hacerlo mejor que el español en Nueva York para retener el título mundial.

Alcaraz tiene claro su objetivo: volver a lo más alto del ranking ATP. El español quiere recuperar el trono, de momento en manos de Jannik Sinner, el rival que le minó en su día.

No sería, de hecho, su primera vez: entre 2022 y 2023, el español y Novak Djokovic intercambiaron varias veces el liderazgo, antes de que el italiano impusiera su propia ley en su meteórico ascenso.

Ahora, sin embargo, Carlitos, el número uno más joven de la historia con 19 años tras su triunfo en el US Open de 2022, sueña con recuperar el lugar más elevado de la clasificación, y justo donde empezó todo.

Adelantamiento virtual

La reciente victoria en Cincinnati ya ha cambiado la balanza. Los números oficiales, actualizados hasta la conclusión del US Open, hablan de una diferencia aún clara: 11.480 puntos para Sinner frente a los 9.590 de Alcaraz.

Pero lo que más pesa es la proyección virtual, que tiene en cuenta los puntos en Nueva York. Aquí el panorama se invierte: al inicio del último torneo de Grand Slam de la temporada, de hecho, el de San Candido perderá los 2.000 puntos ganados el año pasado con el título, mientras que el murciano tendrá que restar sólo 50 a su ranking, fruto de una eliminación prematura en 2024 ante Botic Van de Zandschulp.

El nuevo punto de partida en el US Open será, por tanto, favorable al jugador nacido en El Palmar: 9540 puntos frente a los 9480 de Jannik. Un margen pequeño, pero suficiente para disputarle el liderato mundial. Y los cálculos son sencillos: si ambos paran en la misma ronda, será Carlos quien regrese al número uno al final del torneo, interrumpiendo las 65 semanas consecutivas de reinado de su oponente.

Para J. Sinner, la situación es clara: si no hay un fallo prematuro de su rival, tendría que enfrentarse a él en la final y vencerle.