La estrella británica Justin Rose (45) dijo este miércoles que daría la bienvenida al presidente de Estados Unidos, Donald Trump (79), en el escenario si Europa gana la Ryder Cup el domingo cerca de Nueva York.
El golfista inglés de 45 años espera, además, que la visita del mandatario, un reconocido fanático del golf, cree un ambiente intenso en la competición bienal, que se celebrará desde el viernes en Bethpage Black.
El jugador de más edad en el torneo comienza su séptima participación en la Ryder Cup el viernes, cuando se espera que el mandatario se encuentre entre los 50.000 espectadores en el campo suburbano de Nueva York.
"Sin duda, atraerá mucha atención y patriotismo al evento", dijo el golfista. "No sé qué le diré, pero no creo que vaya a estar necesariamente con nosotros en el tee de salida o recorriendo el campo", señaló.
Trump, de 79 años, hará la última de una serie de apariciones en importantes eventos deportivos este año, incluyendo la Super Bowl, la final masculina del US Open este mes en Nueva York y la final del Mundial de Clubes de la FIFA en julio.
En el certamen futbolístico, ganado por el Chelsea, el presidente celebró en el escenario cuando los Blues recibieron el trofeo.
A Rose no le importaría que se repitiera la escena el domingo, pero no está seguro de que Trump esté dispuesto a ello, ya que significaría que Estados Unidos ha sido derrotado en su propio terreno.
"Mucho ruido" en la Ryder Cup
"Por supuesto, me encantaría tener esa oportunidad", dijo el jugador nacido en Sudáfrica sobre la posibilidad de compartir con el mandatario en el lugar de premiación.
"No estoy seguro de que quiera subir al escenario para felicitar al equipo que gana en su propio terreno, pero, claro, es el presidente, hay que respetarlo, y sería una gran oportunidad", sostuvo.
Los organizadores de la Ryder Cup advirtieron el miércoles a los espectadores sobre posibles retrasos y un aumento de la seguridad cuando el citado Donald asista a la jornada inaugural en Bethpage Black.
Se espera que los aficionados estadounidenses creen un ambiente ruidoso e intenso para la contienda y la presencia de Trump añadirá más leña al fuego.
Sin embargo, J. Rose no está seguro de que D. Trump sea una distracción una vez que comience la competición.
"Creo que habrá mucho ruido a su alrededor, pero no estoy seguro de que sea una distracción continua", afirmó.
"Pero, de nuevo, podría estar equivocado, basándome solo en lo que he oído, en cómo van a gestionar sus movimientos por la propiedad. Escucha, es fantástico para el golf que él participe en el juego y, obviamente, atrae mucha atención", concluyó.